Continuando con esta sección, que poca repercusión tuvo (como tantas de las otras columnas, pero peor aún) analizaremos (yo, hablando en tercera persona) en esta oportunidad un tema muy controversial: El payaso Plín Plín.
¿A qué nos referimos con “un tema muy controversial”? A que como tantos otros temas del cancionero infantil, éste también posee un ritmo similar a otro; es similar al casi emblema de las canciones, que supera toda franja etaria, que logró pegar el pase al exterior del cancionero infantil para ser cantado por personas de todas las edades: el Que los cumpla feliz.
Ya sé lo que están pensando, Que los cumpla feliz no es una canción infantil. Pónganse a pensar un poco sino es infantil estar parado, mirando una torta con velas encendidas, aplaudiendo y cantando con un ritmo y letra simple, apto para ser aprendido por todo niño. Básicamente todos nos sentimos literalmente unos “pelotudos” cantándole el Que los cumpla feliz a alguien; quien además de ser adulado por todos tiene el privilegio de poder reírse de todos los giles que se lo cantan.
Sin más preámbulos (¿cómo me gusta el preámbulo eh?) el análisis del Payaso Plín Plín:
El payaso Plín Plín…
Estamos ante la presencia de un payaso con un nombre extraño, el señor Plín, de apellido Plín. Poco inteligente de parte de sus padres llamarlo de igual forma que su apellido. Es como esa gente que se apellida Ricardo, Ramón, etcétera, pero que cuentan con la suerte de que sus padres no cobraron venganza de una vida de mierda nombrando a su hijo de la peor manera posible. Entonces nos encontramos ante dos padres despiadados, con poco corazón hacia su pobre hijo (digo pobre de antemano, porque ya conocemos que su oficio terminó siendo el de desempeñarse como payaso).
Se pinchó la nariz…
Bueno, vamos a decir la verdad. Plín es un pibe con poca suerte; no bastó que la vida lo castigara cruelmente una vez, sin que le hiciera daño a nadie recibiendo tan espantoso nombre. Ahora desempeñando su labor conocemos mediante la canción que se pinchó la nariz. Es poco común digamos, no es normal que uno ande por la vida pinchándose la nariz; sí por ejemplo es cotidiano pincharte un dedo, un pie o hasta la propia boca comiendo pescado con espinas (lo que ya parte de un error, mal él comer pescado con espinas). Es curioso, sigamos viendo.
Y a los cinco minutos hizo fuerte achís…
Mágicamente nos encontramos ante el final de la canción, andaba inspirado el anónimo que la creó para expandirla como chisme de pueblo en temporada (Marzo a Diciembre es la temporada de chismes), como quien tira la piedra y esconde la mano. Bueno, volviendo a la canción, esta nos dice literalmente que Plín estornuda debido al pinchazo. Quiero despojar toda interpretación literal del tema, acá hay metáforas escondidas maullando como loco.
Recopilemos todo lo analizado anteriormente. Estamos ante la presencia de una persona que tiene problemas con sus padres, seguramente maltratado, con un oficio sin futuro, sin presente y que apenas si le aporta un sueldo para sobrevivir (lo cual ya me permito dudar). Hablamos de la nariz, hablamos de que estornudó por un pinchazo, hablamos de pinchazo. No caben dudas, en esa nariz enorme y roja escondía cocaína, la que lo ayudaba a sobrevivir a su vida maltratada, y a su vez para motivarse y cumplir con su oficio lamentable. Y el pinchazo en la nariz nunca existió, no seamos inocentes y descubramos la metáfora, Plín también se la daba con heroína.
Buenisimo!
ResponderEliminarSe pinchó la nariz por situación de estupefacientes
ResponderEliminarAsí como los osos gummies saltaban de lo loco después de tomar vino con frutilla... Mmmm... esto del cancionero infantil está lleno de mensajes subliminales